El Centro Cultural Itinerante es un programa de la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca que busca acercar la oferta cultural, artística y deportiva de sus filiales a las comunidades periurbanas y rurales de Oaxaca. En pocas palabras: si no puedes venir a participar de las actividades que la FAHHO ofrece en cada una de sus sedes, nosotros nos acercamos a ti.
En la primera etapa contamos con la participación del Museo Infantil de Oaxaca, las Bibliotecas Móviles, la Fonoteca Juan León Mariscal y la Casa de la Ciudad. En consecuencia, durante octubre llevamos conciertos y talleres de arte, cocina y ciclismo a algunas comunidades y localidades de Valles Centrales: Villa de Zaachila, Trinidad Zaachila, San Pablo Etla y Lachigoló.
Fotografía: BS Biblioteca Móvil
Así fue que el 2 de octubre, en coordinación con el Museo Infantil de Oaxaca y las Bibliotecas Móviles, fuimos a Villa de Zaachila para compartir el primer taller del Centro Cultural Itinerante FAHHO: “Mi pueblo en un frasco”. Nos instalamos en el corredor del Ayuntamiento con utensilios de cocina y cinco calabazas enormes. A la invitación acudieron treinta niñas y niños que acababan de salir de clases. Limpiaron las calabazas, las cortaron en cuadritos (bajo la supervisión del equipo educativo del MIO) y, con ellas, prepararon mermelada. Mientras la mezcla se cocinaba, aprendieron a hacer etiquetas con una técnica de grabado en fomi, que consiste en dibujar sobre el material, entintarlo con un rodillo y estamparlo sobre papel. Cuando todo estuvo listo, rellenaron frascos de vidrio con su creación y los etiquetaron con sus propios diseños. Bautizaron sus marcas de mermelada con nombres como “Flor de calabaza”, “Dulce muy dulce” o “Calabaza de miel”. Cada quien se llevó su frasco para compartir con la familia.
Las niñas y los niños se divirtieron muchísimo. Para ellos fue una sorpresa descubrir cómo, con sus manos, podían crear algo que normalmente encontrarían en el supermercado. Al terminar la actividad, mientras cruzaban la plaza principal, escuché a una mamá decirle a su hija, “qué bueno que ya sabes preparar la calabaza, ¿vas a hacer para ponerle a tu abuelito?”.
Fotografía: Museo Infantil de Oaxaca, MIO
El CCI se rige por principios que reconocen la cultura como un derecho humano fundamental, priorizando la equidad y la inclusión. Incentiva la apropiación del espacio público, con el objetivo de democratizar las actividades artísticas, culturales y deportivas. Además de fomentar la creatividad, el CCI, por medio de los talleres, busca transmitir habilidades prácticas que se pueden aplicar en la creación de productos culturales con valor social y, por qué no, profesional.
Te invitamos a estar pendiente de nuestras próximas actividades, búscanos en las redes sociales, la agenda y los boletines de la FAHHO. ¡Nos vemos pronto!
Mapa de Santa Clara Huitziltepec por parte de Adabi. Fotografías: Acervo de Adabi de México
Con gran satisfacción, el 21 de agosto de 2024 se llevó a cabo la entrega del Mapa de Santa Clara Huitziltepec en las instalaciones de Apoyo al Desarrollo de Archivos y Bibliotecas de México, tras la finalización de su intervención. En el evento estuvieron presentes el presidente municipal de Huitziltepec, Jorge Flores García, la cronista Norma Larios Cortés y el etnógrafo Carlos Ulises Vargas Pérez.
El proyecto de conservación comenzó en 2021 con el diagnóstico y la restauración de dos obras pertenecientes a este municipio de Puebla. La primera es el documento Título de Tierras, del Archivo Histórico Municipal, un encuadernado que data del siglo XVIII. La segunda obra es el Mapa de Santa Clara Huitziltepec, una pintura sobre tela que ingresó junto con el documento mencionado, pero cuyo grave estado de conservación requirió un proceso de restauración más prolongado para asegurar un mejor resultado. Esto se debió, principalmente, a que la tela estaba doblada y la capa pictórica era tan frágil que podía desprenderse.
Durante el desarrollo de las actividades se mantuvo una comunicación constante con el municipio, se recibieron visitas de diversos integrantes del Ayuntamiento para compartir los avances de la restauración y se les asesoró en cuestiones de conservación para que la obra regresara a un espacio adecuado.
El esfuerzo de esta comunidad por conservar su patrimonio no se ha detenido, ya que gestionaron con el Gobierno del Estado de Puebla la creación de Huitzilcalli, Museo Histórico de Santa Clara Huitziltepec, recinto donde ya se encuentra resguardado el mapa junto con reproducciones de otros documentos sobre la historia del sitio. Para ello, se estableció una valiosa alianza con especialistas de la Escuela Nacional de Antropología e Historia para la investigación, el guion, el diseño y la museografía; especialmente para el montaje de la obra, que procura su conservación y su uso para el conocimiento y disfrute de los pobladores y visitantes.
Este proyecto de restauración de bienes documentales y culturales de Santa Clara Huitziltepec, Puebla, concluye con gran admiración por el esfuerzo continuo de los involucrados y un profundo agradecimiento por la confianza depositada en Adabi.
Líbano es, para nosotros los descendientes de sus emigrados, un pozo de sabiduría y el germen de perpetuas meditaciones. Ojalá, y a modo de reafirmación de nuestros deseos de ser y tener la condición de buenos ciudadanos en los países que nos escogieron como patria, en nuestro caso México, conservemos un respeto a las raíces ancestrales, aquellas que llevaremos por siempre en nuestra esencia, nuestros nombres y nuestros rostros.
Con este pensamiento cuatro amigos, con ideales afines, se reunían periódicamente para compartir sus vivencias. En 1987, este grupo buscó nuevas acciones en favor de Líbano, esto como una iniciativa del C. P. Alfredo Harp Helú, y entendiendo la responsabilidad de unir esfuerzos para la difusión de la cultura libanesa, reforzando, además, los empeños del Centro Libanés, la comunidad mexicana de ascendencia libanesa y la sociedad mexicana en general.
El grupo protocolizó la formación del Instituto Cultural Mexicano Libanés, A. C., integrado por Alfredo Harp Helú, quien fungió como presidente; Antonio Trabulse Kaim, director general, Emilio Trabulse Kaim, gerente general y Antonio Rafful Assam, tesorero. Un mes más tarde se unió el Lic. José Slim Helú, como consejero, quien lamentablemente fallecería al poco tiempo. Pensando en el futuro, se incluyeron a cuatro personas jóvenes en el Consejo de Administración: Charbel Harp Calderoni, Martha Trabulse El Khouri, Emilio Trabulse Amor y Antonio Rafful Zarur.
La meta principal siempre ha sido organizar actividades culturales en favor de la difusión de la historia de Líbano, su gastronomía, su arqueología y bellezas naturales, su mosaico religioso, su desarrollo en las bellas artes, sus costumbres y tradiciones, su sabiduría popular, el valor y las duras pruebas superadas por su emigración y todo aquello que ayude al entendimiento de la identidad libanesa y el papel de Líbano en el concierto internacional.
La gran motivación de conservar la memoria de nuestros antepasados, de aquellos que vinieron y fincaron las bases de lo que son ahora las vidas de sus descendientes; de aquellos hombres y mujeres que se vieron en la necesidad de abandonar su cuna libanesa debido a la opresión otomana y que decidieron establecerse y buscar un buen futuro en México; de quienes nos escogieron una nueva patria en la cual expandir aquella que los vio nacer. Es así como surge una asociación cuyo fin es preservar esta memoria para hacerla llegar a nuestros descendientes, a las generaciones por venir, para que conozcan sus raíces y las adversidades que enfrentaron sus antepasados para que ellos pudieran dormir tranquilos.
Fue del C. P. Alfredo Harp Helú la iniciativa de formar el Archivo Libanés de México, A. C., quien contó con la solidaridad inmediata del Centro Libanés y el apoyo del Consejo Directivo para dar difusión a sus objetivos. ALIME labora salvaguardando y difundiendo hechos que ahora son recuerdos, pero que no deben quedar en el olvido, sino estar en el presente y permanecer para el futuro. Contamos con fotografías, documentos oficiales, contenido de música libanesa –entre los que se encuentran discos elaborados en pasta que datan de 1904–, documentales y películas libanesas, publicaciones de la colonia libanesa como Al Kustas, Al-Jawater, Baitna y Líbano en México, así como una nutrida y valiosa biblioteca.
Pero nada de esto tendría un valor real si careciéramos del apoyo de toda la comunidad mexicana de ascendencia libanesa para hacer crecer un testimonio histórico y cultural tan importante en el desarrollo social, intelectual, deportivo y profesional de México. Es un proyecto en constante crecimiento que busca, clasifica y muestra un material ilustrativo sobre un grupo que se integró cabalmente al mestizaje mexicano.
Agradecemos infinitamente el apoyo de la Fundación Alfredo Harp Helú, pues, sin duda, es gracias a ello que estas instituciones han podido continuar enalteciendo y difundiendo la cultura libanesa, además de la mexicana.
Creemos firmemente que trabajar por preservar la historia de nuestro origen hará que el recuerdo paterno alimente nuestros corazones y el materno los haga latir con dulzura.
Fotografía: Acervo Iturribarría que resguarda la Biblioteca Francisco de Burgoa.
La Biblioteca Fray Francisco de Burgoa resguarda el patrimonio bibliográfico y documental de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, mismo que se ha ido enriqueciendo a lo largo de los años, hasta contar con treinta mil títulos que abarcan una variedad de temas en materia de religión, política, cultura y lingüística. Además, conserva diferentes fondos que han sido donados por distintos personajes oaxaqueños.
Un ejemplo de ello es el acervo Jorge Fernando Iturribarría (1902-1981) –uno de los más importantes historiadores de Oaxaca–, en cuyo proceso de inventario de documentos y posterior catalogación participé durante mi servicio social. Los documentos del acervo Iturribarría me dieron la oportunidad de ver cómo era el Oaxaca del siglo XIX, con sus cambios geográficos y políticos, mientras que la ciudad se encontraba modernizando sus carreteras y edificios.
Por otro lado, cada uno de los documentos me mostraron la vida de Iturribarría: sus ocupaciones políticas, escolares, así como sus pasatiempos. Este acercamiento al material bio-bibliográfico me dio la posibilidad de conocer también el estilo de su escritura, la forma de corregir y quiénes de sus amigos eran sus lectores frecuentes, así como sus investigaciones y las fuentes de sus biografías. Conforme avanzaba el tiempo me di cuenta de la riqueza del acervo, así como del trayecto del señor Iturribarría.
Durante el proceso de registro, fue interesante conocer la correspondencia entre el historiador y sus amistades, ya que sin duda alguna eran personalidades relevantes, como Manuel Brioso y Candiani, Manuel R. Palacios, Jorge L. Tamayo, Fernando Ramírez de Aguilar, Daniel Cosío Villegas y los hermanos Bustamante Vasconcelos, por mencionar algunas de las más cercanas.
Fotografía: Acervo Iturribarría que resguarda la Biblioteca Francisco de Burgoa.
Además de ser grandes compañeros de aventuras, entre ellos compartían materiales y fuentes de investigación (muchas veces tenían que sacarles copias mecanografiadas para que pudieran ser analizadas, ya que por su importancia se temía que estas fueran extraviadas por la Agencia de Correos). Esto me recuerda una breve anécdota que se cuenta en la carta de Jorge Fernando Iturribarría a Manuel R. Palacios, fechada el 9 de septiembre de 1957, en la cual le confirma la llegada tardía de los totopos istmeños que se habían extraviado en la oficina de Correos.
Conforme avanzaba en el proceso de inventario, me encontré con el manuscrito de su obra, las biografías que utilizó para su libro La generación oaxaqueña 57: síntesis biográfica. En este texto expone la vida de grandes políticos, entre ellos Benito Juárez, Porfirio Díaz, José María del Castillo Velasco, Marcos Pérez y José María Díaz Ordaz, por mencionar algunos de los nombres que aparecen en esta obra.
Finalmente, uno de los últimos trabajos de Iturribarría que me encontré fue una recopilación de cartas publicadas en el periódico El Imparcial entre mayo, junio y julio de 1917. A partir de esta recopilación, tituló su trabajo El archivo de la reacción. Este libro recopila la correspondencia con José Yves Limantour –uno de los principales políticos y financieros en el porfiriato– y su grupo; además de las epístolas, Iturribarría también hizo una introducción histórica de este compendio antes de presentar su propuesta a la editorial Fondo de Cultura Económica para su publicación, tal como lo indica Iturribarría en su carta fechada el 30 de mayo de 1971.
Para finalizar, hago un exhorto a que nuestros lectores se acerquen a leer esta obra y a conocer el acervo que está disponible para consulta en la Biblioteca Fray Francisco de Burgoa, y vean los tesoros que se pueden encontrar ahí.
Fotografía: Acervo del Museo de la Filatelia de Oaxaca
El mural comienza en el lado izquierdo con una serie de letras en color gris, que mezclan nuestro alfabeto tradicional con el cúfico, un antiguo estilo de caligrafía árabe. Esta fusión se refleja en las prolongaciones y adornos presentes en las terminaciones de las letras, creando un enlace entre culturas y tiempos. Dentro de estas letras, se encuentran diecisiete traducciones de la palabra Oaxaca en lenguas originarias del estado, como el zapoteco, mixteco, mazateco, entre otras. Estas palabras se entrelazan y forman un marco natural que enmarca varios timbres postales que descienden en forma de lluvia, representando a diversos insectos propios de la región, símbolos de la riqueza natural y cultural de Oaxaca.
Hacia el otro extremo del mural, se despliegan círculos y rombos elaborados en letras góticas de distintos colores. Cada figura geométrica contiene los nombres de personas que han caminado por las calles de Oaxaca.
El mural concluye con la imagen de un colibrí, símbolo de ligereza y rapidez, que atraviesa las figuras geométricas. Con un sobre en el pico, simboliza la comunicación, mientras intenta atrapar uno de los timbres postales que caen, evocando el acto de enviar un mensaje y la esperanza de que llegue a su destino.
La Agencia de San Pablo Güilá pertenece al municipio de Santiago Matatlán en Oaxaca. La población hablante del zapoteco se rige por un sistema de usos y costumbres en donde la Asamblea General Comunitaria es la máxima autoridad de gobierno junto con el cabildo municipal, las autoridades ejidales, eclesiásticas y las mesas directivas de la sección primera y tercera en las que está dividido el pueblo.
La organización del archivo de la agencia municipal formó parte del proyecto planteado por las mesas directivas para el ejercicio de su cargo por acuerdo de la Asamblea. Por eso contactaron al equipo de Adabi Oaxaca, para realizar los procesos archivísticos que requería un conjunto de documentos que encontraron durante sus gestiones agrarias.
Ahora el archivo de la agencia municipal de San Pablo Güilá está organizado en las secciones Gobierno, Hacienda, Justicia y Registro Civil, cada una subdividida en series de acuerdo con sus actividades administrativas. Es así como el archivo se conforma de dieciséis cajas con documentos que van de 1582 a 1980. El expediente más antiguo está integrado por una serie de testimonios legales sobre la propiedad de la tierra que fueron presentados en un conflicto por linderos con San Baltazar Chichicápam. Entre ellos se encuentra una licencia del 4 de diciembre de 1582 otorgada por el virrey Lorenzo Suárez de Mendoza a Domingo García, indio principal del pueblo de San Pablo, para tener en sus terrenos doscientas ovejas con la condición de evitar el daño en las siembras de los naturales. Asimismo, se adjuntan otras mercedes otorgadas a particulares o al común del pueblo para establecer estancias de ganado menor a fines del siglo XVI. Estos documentos demuestran la posesión de sus tierras desde tiempos inmemoriales.
Fotografía: Acervo de Adabi Oaxaca
Otros documentos permiten conocer la historia de la comunidad, e incluso la de los pueblos vecinos con los que Güilá mantuvo relaciones políticas o conflictos territoriales. Algunos tratan sobre la defensa de su territorio, la construcción del templo, los abusos de los alcaldes mayores o frailes por servicios personales, los daños causados por el ganado de las haciendas vecinas, etc. También se identificaron tres documentos escritos en lengua zapoteca.
De igual modo, se decidió organizar el archivo de concentración, integrado por documentos de fechas más recientes resguardados en 128 cajas. Contiene información sobre el funcionamiento de la agencia municipal como la asignación de cargos, actas de asamblea, fiestas religiosas, construcción de edificios públicos, escuelas, etc. Sin embargo, su acceso será restringido porque aún tiene trámites vigentes.
Finalmente, el inventario facilitará la consulta del archivo de San Pablo Güilá, que ahora está disponible para todos los interesados en la historia de la comunidad y de esta región de los Valles Centrales. Debo mencionar que cuando informamos sobre los resultados de este proyecto durante la entrega-recepción a las mesas directivas, el pueblo reunido en asamblea expresó su satisfacción con este trabajo, asimismo, externó su agradecimiento a la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca.
Cada artista sabe que está viviendo por segunda vez. Carlos Fuentes
El Centro Cultural San Pablo presenta este otoño una exposición dedicada al arte en vidrio. Tres empresas que producen vidrio en Oaxaca fueron fundadas por artistas y, a lo largo de los últimos años, han trabajado con diseñadores o con otros artistas para crear obras en colaboración, además de sus propias piezas.
Para esta exposición Christian Thornton (Xaquixe) presenta una instalación de enigmáticas obras que dialogan con el camino de agua del patio Dómina, como si quiotes de vidrio negros y blancos crecieran del camino sobre pequeñas piedras como enormes botones a punto de abrir, junto a semillas de vidrio descansando con toda su voluntad en tensión concentrada.
Estas plantas que viven sobre tallos de acero, parecen también flamas detenidas en otro tiempo, y son ideales para este patio donde un día puede durar un año, o diez años. Christian Thornton también presenta distintas obras realizadas en colaboración con Gandalf Gaván, Christina Stadlbauer y Mateo Gabayet; y obras que algunos artistas han realizado en Xaquixe: Jan Hendrix, Nicola López, Adán Paredes y el maestro Francisco Toledo.
Salime Harp (Xaquixe) presenta una instalación de 8 metros de altura compuesta por hojas y flores de vidrio de distintos colores que remiten a un vestido del Istmo de Tehuantepec, y nos muestran las posibilidades del material para construir desde pequeñas hojas de un verde hermoso, hasta flores grandes de un rojo o naranja intensos que recuerdan el horno y el fuego que les dio origen.
Esta obra de Salime, pensada y diseñada para ese muro del atrio del Centro Cultural San Pablo, además de un homenaje a la tradición textil de Oaxaca, es un reconocimiento a la habilidad de los artesanos y artistas que usan el vidrio como materia prima.
Y por otra parte, considerando que el vidrio es arena de sílice (SiO2) + carbonato de sodio (Na2CO3) + caliza (CaCO3) + fuego que calienta estos elementos a 1500 grados centígrados; en esta hermosa instalación hay también una metáfora del fuego como forma de presencia concentrada, como modalidad del sol que está en todas partes, y que consume.
Fotografías: Acervo del Centro Cultural San Pablo
Jason Pfohl (Gorila glass) presenta en la exposición una instalación titulada: Cruzando el umbral, que es el registro de un futuro performance que ya sucedió, pero regresa para seguir ocurriendo una y otra vez con las clásicas etapas de la narratología y como un arquetipo de la comprensión de la experiencia humana.
La instalación con esferas de vidrio que se suspenden sobre los vestigios prehispánicos de San Pablo, incluye fotografías del performance inspirado en la sensación de volar, con el recorrido canónico de las narraciones míticas: soñar, buscar, despertar, ascender, capturar, completar una serie de pruebas, recibir asistencia divina, cumplir la búsqueda y regresar.
En esta obra, el vidrio simboliza el santo grial al que se une el artista en un momento de conjunción, cuando aparecen las esferas como formas materiales que antes no estaban, y gracias a una acción emergen de otra manera en el mundo, como el propio artista que encuentra una nueva forma de estar en el mundo.
Diego Vides (DoStudio) presenta obras realizadas por él mismo y otras que ha elaborado en colaboración con diseñadores y otros artistas. Cada una de sus obras puede funcionar individualmente, pero también en conjunto, cada una otorga significado al espacio que ocupa y propone un ambiente particular; y como están diseñadas para tener un uso, le proporcionan nuevo sentido al espacio que ocupan en conjunto; o incluso a la experiencia en la cual se usan; por ejemplo, al acto de fe de encender veladoras.
La empresa de Diego Vides se enfoca en colaborar con diseñadores para producir productos de vidrio soplado combinando técnicas tradicionales y contemporáneas; en algunos casos incluso otorgando un nuevo uso a materiales, como en el caso de la colaboración con FIBRA x Hermano Maguey, que dio origen a las hermosas lámparas hechas con vidrio y con fibra de agave que cae mitigando y cobijando la luz al mismo tiempo para crear un ambiente sereno.
Gracias al extraordinario trabajo que han realizado estos artistas en sus empresas, y a la iniciativa de Salime Harp, el Centro Cultural San Pablo presenta también la segunda edición de la Bienal Iberoamericana de Arte en Vidrio, con obras en concurso y obras de artistas invitados.
Fotografías: Acervo del Centro Cultural San Pablo
El primer lugar para artistas intermedios, se otorgó a la artista colombiana Alejandra Lamprea, quien elaboró, en la técnica conocida como “A la flama”, unas pequeñas semillas ámbar translúcidas; como si fueran tubérculos, de los cuales emergen tallos delgados en distintas etapas, raíces y una hoja, sugiriendo que puede ser una misma semilla en diferentes momentos de la germinación, o varias semillas que hacen emerger plantas que al mismo tiempo las transforman.
Además de abordar el tema de la Bienal, que consistía en explorar la idea de “Origen”, esta obra también trae a colación el misterio de la emergencia que da paso a la comprensión, y alude a la voluntad que es el principio de cada cosa visible.
El primer lugar de la categoría de avanzados lo obtuvo la artista colombiana Martha Isabel Ramírez, por la obra Nacedero. Doce cajas de vidrio similares a cajas de Petri albergan gotas de vidrio alargadas con diferentes formas, aludiendo al agua como origen de todo. Las piezas cuelgan separadas del muro para producir sombras donde los círculos se multiplican y se confunden. Para la artista, las sombras y la luz que atraviesan sus cajas de cultivo son parte de la obra, pues sirven para intuir los distintos ámbitos en que funciona una idea o una emoción.
En este caso el vidrio no sirve solamente para construir una figura o forma reconocible, sino para expresar una idea sencilla y profunda al mismo tiempo.
Ambos premios coinciden en abordar el origen como momento en que algo aparece en el mundo material, algo adquiere forma o cuerpo y empieza a estar. Normalmente el arte tiene esa facultad de otorgar una nueva vida a algo que antes no estaba de cierta forma, incluso a la experiencia.
Además de las rejas de acero, el Centro Cultural San Pablo cuenta con varias obras elaboradas en vidrio por el maestro Toledo; ellas dan cuenta de que mirar el mundo por segunda vez, renovar cotidianamente el significado de cada experiencia, es una manera de descubrir la poesía que habita discreta en cada día, en cada material y cada objeto, para permitirle estar en la vida cotidiana.
En esta edición del Boletín abrimos con grandes celebraciones: el triunfo de los Diablos Rojos del México en la Serie del Rey, éxito con el que alcanzaron su campeonato número diecisiete. En este tenor, también podemos leer de esos integrantes anónimos del equipo que comparten sus triunfos. También los Guerreros de Oaxaca figuran en estas líneas por su excelente participación en el campeonato de la Zona Sur, ya que protagonizaron una batalla sin igual que dio muestra de su perseverancia al enfrentarse a duelo con los Diablos Rojos. Además, como subcampeón fue que el equipo de basquetbol de los Diablos Rojos finalizó la Copa Value, una digna manera de celebrar su recién incursión en la Liga Nacional de Baloncesto Profesional de México.
Seguimos Leyendo celebra el egreso de una generación más de sus diplomados internacionales. Por otro lado, la Biblioteca Francisco de Burgoa recuerda el origen de su taller de restauración. En el rubro de archivos, Adabi nos habla sobre su incursión en TikTok como una vía efectiva para alcanzar más y nuevos públicos, asimismo, comparten una nota sobre su participación en el proyecto de la Biblioteca de Alejandría con el envío de tres libros. A su vez, el Instituto Cultural Mexicano Libanés se suma a este equipo para difundir la cultura libanesa y mexicana.
Por su parte, el Museo Infantil de Oaxaca nos invita a conocer cómo, en un determinado momento de la historia de México, deportes y ferrocarriles unieron sus caminos. El Museo de la Filatelia de Oaxaca presenta una entrevista con los artistas cuyas obras conforman la exposición “Las letras de mi ciudad”. Por su parte, el Museo Textil de Oaxaca anuncia la 4ª edición del Encuentro de Textiles Mesoamericanos dedicado a la memoria del maestro Francisco Toledo. En otro orden de ideas, el Taller de Restauración nos habla sobre el proceso de recuperación de la Casa de Cultura de Juchitán, mientras que Casa de la Ciudad comparte una reseña acerca de la conferencia “Humanizar el urbanismo y habitar la arquitectura”, del arquitecto Ignacio Mendaro Corsini.
La labor social de los espacios culturales se deja ver en el caso de la Red de Bibliotecas BS, por medio de su compromiso con la promoción y el cuidado de la salud mental. Asimismo, compartimos una nota sobre una donación de equipo médico al Hospital General Dr. Aurelio Valdivieso buscando contribuir al bienestar de la sociedad.
Esperamos que estos textos no solo ilustren las actividades que se emprenden desde la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca, sino que puedan ser un detonador de otras acciones amables que ustedes, nuestros lectores, puedan llevar a cabo desde sus propios contextos y posibilidades.
Celebración de campeonato. Fotografía de Enrique Gutiérrez
Aunque los fríos números pudieran sugerir una ruta sencilla hacia el camino de regreso al trono –lo mismo que en 2014– lo cierto es que el club dirigido por Lorenzo Bundy logró retomar el dominio y el buen beisbol a lo largo de la campaña regular, en donde cerraron con un porcentaje de juegos ganados muy cercano al ochenta por ciento. Esto representa un récord de al menos noventa encuentros en la historia de la LMB en temporada.
Fue así como, con una barrida en cuatro juegos ante los Sultanes de Monterrey, los Diablos Rojos del México capturaron su título diecisiete en la Liga Mexicana dos días antes de cumplir 10 años de su campeonato más reciente, poniendo fin a la segunda espera más larga en la historia del equipo escarlata.
Para llegar a la sexta Serie Final ante el poderoso escuadrón regio, los Rojos tuvieron que atravesar por su momento más crítico de todo el año, cuando, en la lucha por la supremacía de la Zona Sur, los Guerreros de Oaxaca los tuvieron contra las cuerdas, quedando a una derrota del pase a la final. Así, los Diablos tuvieron que acelerar al máximo para sumar cuatro victorias consecutivas y salvar un obstáculo que les exigió hasta el límite, y que, al mismo tiempo, les devolvió el nivel de juego y la inspiración para vencer a los Sultanes con una velocidad que pocos hubieran pronosticado.
Celebración de campeonato. Fotografía de Enrique Gutiérrez
Con un cuerpo de picheo absolutamente dominador, un bateo demoledor y una defensa prodigiosa, la Pandilla Escarlata jugó por nota la Serie del Rey para conquistar su segunda Copa Zaachila, imponiendo, como en el rol regular, marcas espectaculares:
El marcador de 17-0 en el segundo juego representa la segunda cantidad más alta de carreras anotadas en la historia de los playoffs, además de que es el score con diferencia más amplia en una blanqueada en postemporada.
Sumando las cuatro victorias de la Serie del Rey de 2014, los Diablos Rojos ahora tienen marca de 8-0 en sus últimos dos compromisos titulares.
Entre los juegos dos y cuatro de la reciente Serie Final, los lanzadores del México llegaron a completar 29 entradas al hilo sin admitir carrera.
En el cuarto encuentro, donde se definió el campeonato, el lanzador abridor, Brooks Hall, llegó hasta la sexta entrada tirando juego perfecto. Al final se quedó con la victoria al trabajar dos hits en siete entradas.
La asistencia de más de 20 000 personas en el tercer juego garantizó que los Rojos rebasaran el millón de aficionados que tuvieron la oportunidad de ver al equipo en vivo.
Recordando su participación en la más reciente Serie Mundial, ganada por los Yanquis, Robinson Canó participó en el último out del campeonato 17 de la Pandilla Escarlata.
Al concretarse la coronación en suelo neoleonés, la directiva de los Diablos Rojos no podía quedarse con las ganas de celebrar con sus fieles seguidores, quienes dos días después asistieron al Estadio Alfredo Harp Helú para vivir una fiesta sin precedentes en la historia del beisbol mexicano. El final feliz que se merecían los mejores Diablos de todos los tiempos y una afición que esperó 3 651 días para volver a vibrar con un campeonato que se recordará como uno de los más especiales, donde estaban Canó y Bauer, con su núcleo que se movía con el poder de veinticinco corazones latiendo con el mismo objetivo: Ganar.
Cronistas de Diablos Rojos del México. Fotografía de Enrique Gutiérrez
Debo confesar que jamás pensé derramar lágrimas por el logro de un equipo deportivo, pero así sucedió cuando Jesús Fabela anotó la carrera que convirtió a los Diablos en campeones del Sur. De pronto sentí una enorme emoción compartida con las familias del personal del equipo que estaban a mi alrededor. Todos brincamos, aplaudimos y sí, lloramos, porque, si bien no nos toca estar en el terreno o ser parte del roster, todos estábamos listos para la final. Es impresionante ver la cantidad de personas que integran al equipo aunque no estén sobre el diamante.
Personal del Estadio Alfredo Harp Helú. Fotografía de Enrique Gutiérrez
¿Qué sería de los jugadores sin uniformes y zapatos limpios? El querido don Gabino ha atestiguado ya 15 de los 17 campeonatos de los Diablos, y desde el vestidor los acompaña en cada jugada. No podemos olvidar tampoco a don Raúl, sastre del equipo, quien se encarga de personalizar todas las camisolas para que podamos identificar a los jugadores a la distancia, ya que pocos son los que podrán reconocerlos con tan solo su forma de caminar. También están Bryan y su equipo de diseñadores, quienes crearon los trajes que pasarán a la historia esta temporada, al igual que los creadores de contenido que alimentan las redes sociales del equipo. Además, resulta fundamental todo el personal de oficina encargado de que todo fluya sin ningún contratiempo.
Don Gabino, sastre de los Diablos Rojos del México. Fotografía de Enrique Gutiérrez
El equipo de cronistas merece mención aparte. He tenido el gusto y privilegio de ver cómo se preparan para transmitir las emociones del juego cuando no es posible estar presentes, viviendo esa experiencia casi mágica de estar en un partido de beisbol. He visto también lo mucho que quieren al equipo y les apasiona estar frente a un micrófono con la enorme responsabilidad que eso implica. Y por supuesto, los propietarios, quienes le tienen un profundo amor al equipo y al beisbol, y cuando están en el estadio se emocionan, lo sufren y lo gozan como cualquiera de los otros 20 000 aficionados.
Don Martín Vidal†, encargado del cuidado de los campos de juego del equipo. Fotografía de Enrique Gutiérrez
Y así podría seguir la lista. Los encargados del cuidado del campo, todo el personal de limpieza, meseros, guardias de seguridad, vendedores… todos los que le dan vida al equipo con su trabajo durante los 365 días del año. El equipo se hace aún más grande cuando pensamos en las familias de los miembros de la organización: gustosos viudos y viudas del beisbol que somos testigos y acompañantes de todas las emociones que se viven no solamente durante la temporada. Sin duda, es una experiencia que se lleva en el corazón: poder ser parte de la incansable entrega y enorme amor al equipo, aunque nunca vayamos a escuchar a los fanáticos corear nuestros nombres.
Este 2024, para la afición y directiva de los Guerreros de Oaxaca, será muy difícil de olvidar; esto se debe a las grandes contrataciones que se hicieron para tener una temporada tan exitosa.
Desde el primer día de temporada regular, uno de los peloteros que demostró solidez, y sobre todo constancia con la ofensiva, fue el exgrandes ligas venezolano Alexi Amarista, quien tuvo el mejor año desde su llegada al beisbol mexicano en el 2018, todo esto en el rubro de imparables (133), hits dobles (25), hits triples (5), cuadrangulares (15) y carreras producidas (57). Además, fue una de las piezas claves en la defensiva, y en especial en los juegos de postemporada, donde con su oportuno bat contribuyó para que Guerreros tuviera esos grandes playoffs, logrando, en un total de 18 juegos, 31 imparables, 10 dobles, 4 cuadrangulares, 13 carreras producidas y un porcentaje de bateo de .373.
Fotografías: Eduardo González
En el tema de jugadores mexicanos, pero ahora en la ofensiva, el hermosillense Roberto Ramos fue uno de los peloteros valiosos que llegó de la banca para responder a la llamada “hora cero”, siendo un jugador importante y de confianza para cualquier mánager. En 64 encuentros disputados, Ramos conectó 60 imparables, 12 dobles, 15 cuadrangulares y 41 carreras producidas, terminando la campaña regular con un porcentaje de bateo de .299; Ramos tuvo su mejor mes con el bat en junio, cuando, en 24 encuentros, bateó para .267 con 23 imparables, 3 dobles, 8 cuadrangulares y 18 carreras producidas, consolidando desde ese momento la gran temporada que tendría el cañonero.
Alguien que se ganó el corazón de la afición oaxaqueña y que, además, está en su tercer temporada con Guerreros, fue el norteamericano Kyle Martin, quien tuvo otra jornada exitosa personal y colectivamente, alcanzando cifras arriba de 20 cuadrangulares (21, exactamente) y un total de 68 carreras producidas este 2024. Martin tuvo una gran postemporada con un total de 18 encuentros, 21 imparables, 6 cuadrangulares y 21 compañeros llevados al plato; el zurdo fue el líder de jonrones en el equipo zapoteca.
Fotografía: Eduardo González
A pesar del poco tiempo que estuvo en tierras oaxaqueñas, el dominicano Jerar Encarnación fue pieza importante al inicio de la temporada con grandes actuaciones con el madero; en tan solo 26 encuentros, el cañonero conectó un total de 19 cuadrangulares y produjo 36 carreras al plato. El 15 de mayo, Encarnación recibió el llamado para unirse a los Gigantes de San Francisco, equipo donde ya jugó este año en grandes ligas.
En el picheo, Guerreros puede presumir que contó con uno de los mejores lanzadores en la campaña regular, uno orgullosamente mexicano: el sonorense Esteban Bloch; el derecho fue el líder de juegos ganados en toda la temporada dentro del equipo con un total de 8 ganados y solo 1 juego perdido (siendo este su mejor año en toda su carrera).
Bloch (14) además culminó en el top 10 de los mejores lanzadores en el rubro de HOLDS (preservación de ventaja), siendo pieza clave en el bullpen del equipo zapoteca; culminó la temporada como el lanzador de la octava entrada, preparando el juego para el cerrador.
El norteamericano Solomon Bates, quien a pesar de que no inició la temporada por una molestia en el brazo lanzador, terminó por ser uno de los pitchers en el staff de abridores de la tribu bélica, con un total de 6 juegos ganados y 5 perdidos, estos números no reflejan el resultado de la gran temporada que tuvo Bates con Oaxaca.
El dominicano Radhames Liz fue uno de los jugadores que vino de atrás para tener un gran 2024, fue esencial en la rotación abridora de los Guerreros de Oaxaca en la recta final y playoffs. Liz, quien próximamente cumplirá 41 años, destacó con su brazo derecho y fue, principalmente, uno de los mejores lanzadores de la tribu bélica en el rubro de efectividad (3.43 ERA), para así ser el segundo abridor en la ronda de playoffs de Oaxaca.
Fotografía: Eduardo González
Luis Fernando Miranda –quien cuenta con varios galardones en su carrera, tanto en el beisbol de verano como en el de invierno– tuvo otro buen año y, especialmente, libre de lesiones, lo que contribuyó a su constancia y preeminencia en la rotación de los bélicos. El mes de mayo fue el mejor de 2024 para Miranda, cuando en 4 salidas consiguió 2 victorias sin derrota, además de tener una efectividad en ese mes de 3.05 en carreras limpias admitidas; no podemos olvidar también ese juego 7 frente a los Diablos Rojos del México en la Final de la Zona Sur, luciéndose en el Estadio Alfredo Harp Helú.
El derecho liga su segunda temporada de forma consecutiva con récord positivo en juegos ganados y perdidos: en el 2023 culminó con 5-3 y este año terminó con 5-4; en juegos de postemporada pudo conseguir una victoria sin descalabro, esto en un total de 5 aperturas.
No podemos olvidar en este gran año que tuvo Guerreros al chihuahuense Luis Carlos Rivera, mánager mexicano que llegó a mitad de temporada para darle otra cara al equipo zapoteca; Rivera comenzó a dirigirlos el 22 de mayo, cuando Guerreros enfrentaba a los Tigres de Quintana Roo en el Estadio Beto Ávila, en donde Oaxaca barrió a los de bengala. Rivera culminó la temporada regular desde su llegada con un récord de 30 juegos ganados y 27 perdidos, colocando a los bélicos en la cuarta posición del standing de la Zona Sur y, además, llevando al equipo hasta la Final de Zona.
En esta nota platicamos de algunos jugadores que fueron clave para el año de los bélicos, pero, sin duda, todos los que formaron parte del equipo este 2024 aportaron su granito de arena para el año tan positivo que tuvo la tribu bélica, lo cual se reflejó en las gradas llenas y emocionadas por parte de la fiel afición oaxaqueña.
Fotografía: Acervo de los Diablos Rojos Basquetbol
En sus primeros dos meses de vida, los Diablos Rojos del México Basquetbol han hecho historia dentro de las duelas, ya que no solo lograron su participación en la Copa Value, sino que alcanzaron el subcampeonato del torneo relámpago organizado por la Liga Nacional de Baloncesto Profesional.
La LNBP programó la Copa Value (del 28 de agosto al 1 de septiembre) como evento especial de mitad de temporada, donde participarían los ocho primeros lugares de la tabla de posiciones, y la Pandilla Escarlata logró su boleto gracias a que ocupaba el quinto sitio de la clasificación con una marca de 10-6.
De esta forma, la quinteta dirigida por el coach Nicolás Casalánguida tuvo su primer gran logro en su campaña de debut, participación que resultó histórica gracias al desempeño que se presentó dentro de la duela del Gimnasio Nuevo León Unido, en Monterrey.
Fotografía: Acervo de los Diablos Rojos Basquetbol
El torneo, que es de eliminación directa, comenzó con una victoria de 90-76 de los Rojos sobre Santos del Potosí, un triunfo contundente en el que el brasileño Maique Tavares finalizó con 20 puntos anotados y 8 rebotes descolgados.
De esta manera, la quinteta escarlata avanzó a la semifinal del torneo donde tenía como rival a la escuadra de los Astros de Jalisco, segundo sitio del standing. El encuentro se desarrolló el viernes 30 de agosto y los Diablos presentaron una contundente actuación defensiva que les permitió llevarse una victoria de 73-71 con la que lograron el pase a la final.
Aunque el trabajo colectivo fue la clave de la victoria, el guardia Avry Holmes se convirtió en el MVP (Jugador Más Valioso) al concluir la jornada con 24 puntos anotados y 3 tableros.
Los capitalinos regresaron a la duela del Gimnasio Nuevo León Unido el domingo 1 de septiembre para disputar el título frente a los Halcones Xalapa, objetivo que, si bien no se cumplió, tampoco impidió que los Diablos Rojos del México hicieran historia al ser los subcampeones de la Copa Value, luego de caer por marcador de 80-69.
El General manager del equipo, Nick Lagios, recibió la copa de subcampeón, convirtiéndose en el primer trofeo que llega a las vitrinas de la escuadra.
Equipo médico donado. Fotografía: Acervo de Comunicación FAHHO
Entre las múltiples acciones que la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca ha emprendido con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los oaxaqueños, se encuentran aquellas destinadas a apoyar al sector salud. En consecuencia, el 17 de septiembre de 2024 se realizó una donación de equipo médico al Hospital General Dr. Aurelio Valdivieso de los Servicios de Salud de Oaxaca. Un donativo en especie equivalente a la suma de $1,024,483.87 pesos, el cual fue entregado en el atrio del Centro Cultural San Pablo a las autoridades correspondientes: el MSP Jesús Alejandro Ramírez Figueroa, subdirector general de Servicios de Salud de Oaxaca, y al Ing. Ulises Caballero Navarro, director general de Administración del Patrimonio de la Beneficencia Pública del Estado de Oaxaca. La ceremonia de entrega estuvo encabezada por la Dra. María Isabel Grañén Porrúa, presidenta de la FAHHO, y la Mtra. Araceli Vergara Tapia, directora de la FAHHO.
Fotografía: Acervo de Comunicación FAHHO
El extitular del nosocomio, el Dr. Bernardo Herrera Juárez, fue quien realizó la solicitud por escrito de la donación de equipo médico a la FAHHO, la cual fue autorizada y confirmada en presencia del jefe de gabinete del Gobierno del Estado de Oaxaca.
Pese a que esta acción es digna de celebrarse, se trata de una respuesta a una serie de problemas que el Hospital Civil ha atravesado desde hace ya varios años.
Esta alianza con la FAHHO es una de las tantas estrategias que el personal médico y administrativo ha puesto en marcha ante la carencia de insumos, materiales, medicamentos, equipo y personal, pues dichas deficiencias han provocado retrasos en la atención y los diagnósticos de pacientes, teniendo como consecuencia la saturación de las áreas de Urgencias y Piso con personas con algún padecimiento, situación que podría derivar en una crisis de salubridad dentro del propio hospital.
El apoyo que la FAHHO decidió brindar a este hospital, celebra los 49 años de servicio de esta institución, creada en junio de 1975, cuya labor se ha enfocado en la asistencia a la salud de la población oaxaqueña más necesitada, así como en la formación de recursos humanos para el cuidado de la salud.
Fotografía: Acervo del Instituto Cultural Mexicano Libanés
Descender de libaneses es un honor; ser mexicana, un orgullo; y poder trabajar para difundir la cultura de ambas naciones, ¡es un placer! Todo esto se me ha regalado al haber sido considerada para dirigir el Archivo Libanés de México y colaborar con el Instituto Cultural Mexicano Libanés, siempre apoyados y respaldados por la Fundación Alfredo Harp Helú y la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca.
Este 2024 ha sido un año de muchas alegrías, pues hemos podido realizar varios eventos, en conjunto con el Centro Libanés, que han llenado de música, baile, historia, cultura y diversión a numerosas personas de la comunidad libanesa y mexicana. Dentro de los mencionados tenemos:
Un concierto de la Orquesta de Cámara de la Ciudad de México dedicado al amor y la amistad, realizado el 21 de febrero; en él, los maravillosos músicos deleitaron al público, entre otras melodías, con las Cuatro estaciones de Vivaldi, proyectando, a la par, un video alusivo de la más alta calidad.
La presentación de los libros La dulce tinta de Al-Jawater / Las Ideas de María Isabel Grañén Porrúa, y El poder de mis bisabuelos, de Mira Harp Grañén, que tuvo lugar el 12 de marzo; fue una noche llena de magia en la que viajamos a través del tiempo y nos llenamos de nostalgia recordando momentos sobresalientes de nuestros antepasados.
Fotografía: Acervo del Instituto Cultural Mexicano Libanés
El Concierto Infantil de la Orquesta de Cámara de la Ciudad de México, llevado a cabo el 21 de abril; en este, muchas familias pudieron disfrutar como niños de un repertorio musical increíble acompañado de las historias de un cuentacuentos.
Un concierto de la Orquesta de Cámara de la Ciudad de México dedicado a padres y madres, llevado a cabo el 19 de junio; se interpretaron canciones como Dime que sí, de A. Esparza; Vivo por ella, de G. Panceri; O sole mio, de D. Capua, las cuales llegaron al corazón gracias al increíble talento musical de los integrantes de la Orquesta y las espectaculares voces de la soprano Tere González y el tenor Felipe Martínez.
La Guelaguetza en el Centro Libanés realizada el 7 de julio; el espectáculo inició con una calenda, la cual estuvo encabezada por la “marmota” –un gran farol esférico cubierto de tela–, los “gigantes” y las “chinas oaxaqueñas”–mujeres portando canastas enfloradas–. La alegría se desbordó con el paso lleno de entusiasmo de los bailes y la música de las diferentes regiones, cada una con sus ricos y bellos vestuarios, los cuales son de verdad un placer a la vista. El ánimo llegó a tope cuando se compartieron con el público tlayudas, chocolate, tamarindos y diferentes productos típicos de las regiones del estado de Oaxaca.
Fotografía: Acervo del Instituto Cultural Mexicano Libanés
El Concierto Mexicano, realizado el 22 de septiembre, dio muestra de la música tradicional; el público disfrutó del talento de la Orquesta de Cámara de la Ciudad de México, la presencia del Mariachi Estelar de América y la Compañía de Danza Folclórica Xihuitzilli.
Deseamos poder continuar alegrando al público con actividades sobre nuestras queridas culturas mexicana y libanesa. ¡Los esperamos en futuros eventos!
Después de seis años de pausa obligada por la pandemia de COVID-19, el Encuentro de Textiles Mesoamericanos vuelve con su 4ª edición por celebrarse del 16 al 20 de octubre de 2024. En esta ocasión dedicaremos el Encuentro a la memoria del maestro Francisco Toledo (1940-2019), artista, promotor y activista incansable con la mirada siempre puesta en el beneficio colectivo. Visionario, el maestro Toledo comenzó a dar forma a lo que ahora es el Museo Textil de Oaxaca, espacio al que donó una importante colección de textiles de México y de otras regiones del mundo, como se puede apreciar en la exposición titulada “Francisco Toledo y la voz de los hilos”, actualmente en curso en la Sala Caracol del MTO. Es importante recordar que su donación de libros sobre arte y técnicas textiles que en principio se consultaban en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, dio inicio al acervo bibliográfico textil que ahora se aloja en la Biblioteca de Investigación Juan de Córdova, en el Centro Cultural San Pablo. El dinamismo con el que vivió el maestro Toledo, aunado a la defensa de los derechos colectivos, serán los puntos de partida del TEXTIM IV: Textil y Comunalidad.
Las presentaciones de ponencias y carteles tendrán lugar en el Centro Cultural San Pablo los días viernes 18 y sábado 19 de octubre. En ellas participan autores y autoras procedentes de distintas regiones de México, así como de Guatemala, Chile, Francia, Estados Unidos y Brasil; mientras que la conferencia magistral estará a cargo de Alejandro de Ávila, cofundador, asesor y curador del Museo. Los días previos, 16 y 17 de octubre, estarán dedicados a la realización de talleres, principalmente por medio de actividades vinculadas con los espacios fundados por el maestro Toledo: cianotipia sobre tela en el Centro Fotográfico Álvarez Bravo, serigrafía sobre tela en el IAGO y afelpado con agujas en el Centro de las Artes de San Agustín, Etla. Además de estos, contaremos con el taller “Crewel: el arte de pintar con lanas”, impartido por una artista procedente de Chile, así como un taller de tejido de fibras vegetales y su implementación en la salud mental, tema que también forma parte del programa de ponencias. Durante ambos días, la Biblioteca de Investigación Juan de Córdova y el MTO ofrecerán una presentación-visita para conocer más sobre los acervos fotográficos y documentales especializados en textiles, así como las guías para tener acceso a ellos.
Para mayores informes e inscripciones, favor de enviar un mensaje a textim@museotextil.org
Proteger, cuidar y cultivar la salud mental desde edades tempranas, es una semilla que crecerá y cimentará la personalidad de niñas, niños y adolescentes por medio del amor y la confianza. Esta responsabilidad compete primordialmente a padres, madres, tutores y familiares del núcleo básico, alimentando la red aquellas personas que forman parte de las relaciones sociales de las infancias y adolescencias.
La Organización Mundial de la Salud define la salud mental como “un estado de bienestar mental que permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés en la vida, desarrollar todas sus habilidades, aprender y trabajar adecuadamente e integrarse en su entorno” (2024).
En la Red de Bibliotecas Infantiles BS, como ámbitos de recreación y aprendizaje, somos empáticos con las necesidades sociales y asumimos nuestra responsabilidad como promotores de buenos hábitos a favor del cuidado mental, es por ello que seguimos planteando propuestas, charlas y talleres para sumar desde nuestros espacios de acción. Cada uno de los proyectos que se realizan en las diferentes sedes, tiene como fundamento el juego y la lectura para fortalecer el desarrollo saludable y estimular las capacidades de los más pequeños.
Fotografía: Acervo de la Red de Bibliotecas BS
Estos principios impulsaron “Crecer mejor: Jornadas de salud mental infantil y juvenil”, que tuvo su antecedente en 2023, en la BS Ferrocarril. Este año, la jornada se extendió a la BS Canteras y la BS Biblioteca Infantil de Oaxaca. Durante tres días tuvimos la oportunidad de compartir, conversar y resolver dudas entre públicos distintos, pero con un mismo fin: acompañar a las familias a construir nuevas estrategias en favor del equilibrio emocional y mental de las infancias y los adolescentes.
Por medio del arte, la literatura y el juego, especialistas en diferentes áreas como la psicología, pedagogía y pediatría, pusieron al alcance de las familias una amplia e interesante propuesta de talleres, charlas, reflexiones guiadas, y muchas otras actividades que permitieron a madres y padres expresar sus dudas, culpas y sentimientos respecto a la educación de sus hijas e hijos. Asimismo, les permitieron reflexionar sobre sus propios tabúes y prejuicios, además de trazar estrategias específicas para los casos planteados por ellos mismos.
Al mismo tiempo, las niñas, niños y adolescentes tuvieron sus propios espacios de expresión, donde el juego fue fundamental para darles la oportunidad de ser escuchados y validar sus emociones.
La Red de Bibliotecas Infantiles BS genera experiencias fundamentales con el fin de brindar información y herramientas que orienten a tutores y familiares a encontrar las vías necesarias para ayudar a las infancias y adolescencias en la superación de los desafíos de la vida.