Una pluma para escribir sobre la importancia de las aves en H2A, Oaxaca
Tomar una pluma para escribir sobre la importancia de lo que es Oaxaca para las aves del continente, ofrece la oportunidad de hacer volar la imaginación. Seguramente, muchos de ustedes saben que México tiene alrededor de 1 100 especies de aves, de las cuales 125 son únicas o endémicas del país, posicionando a México en el 4.º lugar a nivel mundial en cuanto a la riqueza de especies endémicas. En este macro-contexto, Oaxaca destaca particularmente. De esta riqueza avifáunica de México, el 70% se puede encontrar en Oaxaca. El primer estado de la república en diversidad de especies de aves. El primer lugar de la república en especies únicas. Oaxaca es el paraíso de las aves. Esto se debe, en parte, a los corredores migratorios que se conjuntan, la influencia del Golfo y del Pacífico con regiones áridas entre ambos, a la vez de montañas, todo esto entre las zonas Neártica y Neotropical del planeta, creando un mosaico de hábitats y bioregiones que hacen que Oaxaca sea megadiverso. Pero no solamente en aves, sino en culturas indígenas, lenguas que suman 16 con un sinfín de variantes.
Imagínense, Europa, con 27 países y con un territorio 40 veces más grande que Oaxaca, donde se hablan 24 idiomas. Sin embargo, esta diversidad cultural de Oaxaca no solo da pie a una diversidad de lenguas entre humanos, sino también en las aves.
Podemos representar a Oaxaca a través del pájaro de las mil voces, que es un ave de un profundo azul, única en México y que canta, imita tantos cantos de otras especies que personifica la diversidad lingüística del estado. Nos referimos al Mulato Azul (Melanotis caerulescens). Para encontrarlo, nada más hay que abrir tus sentidos y en los alrededores de la ciudad de Oaxaca, lo verás.
Hablar de esta ave es hablar de la riqueza de Oaxaca, su diversidad, amenazas, retos y la magia que emana del estado. Es un ave muy común en las faldas del Cerro de San Felipe, viene a ser cada vez más rara cuando uno se acerca a la ciudad de Oaxaca. Cuando llegas al corazón de la ciudad de Oaxaca, ya no se encuentra, no es un ave urbana. No obstante, en los bordes de la ciudad, como en el Parque H2A, es un residente muy común, y si pones atención y escuchas, lo oirás todo el año, cantando sus miles de voces.
Este parque es de suma importancia, debido a la voracidad de la urbe que le va robando espacios naturales a nuestras aves. La densidad de aves de esta reserva natural no es muy alta, sin embargo, las especies que hay son preciadas por su rareza y su belleza. Es el último bastión, antes de la ciudad, de especies endémicas de México como el Gorrión Embridado (Peucaea mystacalis), los Vireos Enano y Pizarra (Vireo nelsoni y brevipennis), del misterioso y elusivo Mosquero de Balsas (Xenotriccus mexicanus). Si sales del H2A y caminas doscientos metros hacia la ciudad, ya no se encuentran. Son aves endémicas de México, y únicas en el mundo. Tenemos la dicha de que en el Ejido Guadalupe Victoria se cuente con este reservorio de especies emblemáticas. Además, ahí también se observan, en temporadas, varias especies migratorias de todos los colores: amarillo y verde, todo rojo, todo azul, como los colores del arcoíris. Pudiéramos hacer un listado largo de estas especies multicolor que vienen durante el invierno dejando un toque fugaz de radiantes tonalidades.
El Parque H2A es como un museo viviente de la riqueza de los Valles Centrales de Oaxaca. Es también un refugio de estas aves, y de las aves migratorias que ahí regresan cada año porque saben que en este sitio están seguras y que hay alimento para continuar su largo y peligroso viaje de migración. Este parque es doblemente importante para Oaxaca, porque la ciudad carece de un sitio natural urbano en su diseño.
El Parque H2A es el aliado perfecto del Jardín EtnoBotánico para poder estudiar y entender los cambios de las poblaciones de aves entre una zona limítrofe de la ciudad de Oaxaca (H2A) y el medio urbano (Jardín EtnoBotánico). Los dos se complementan y podrían ofrecer a los oaxaqueños la oportunidad de aprender más sobre los métodos de estudio de estos seres maravillosos, de esta enorme riqueza que nos rodea, si creamos un observatorio de aves que vincule a los dos sitios, aplicando estrategias de estudio simultáneo entre ambos sitios y que sirva para promover la apreciación de la riqueza de las aves que nos rodea en Oaxaca.