TELAR DE SAN PEDRO SOCHIAPAN
PALABRAS QUE TEJEN
En el año de 1936 no había mujer o niña en San Pedro Sochiapan (Sochiapam) que no portara un huipil de forma cotidiana. Todos los huipiles se tejían en telar de cintura y se producían localmente. Los hilos de algodón blanco fueron hilados a mano con malacate y la materia prima se cultivó en la zona. Algunos de estos hilos fueron teñidos de color amarillo o en diferentes tonos de morado con plantas locales, pero las tejedoras también incorporaron hilos comerciales de diferentes tipos para formar las franjas rojas tan representativas en dos de sus tres tipos de huipil (el huipil de tres sedas y el huipil de siete sedas), así como para dar un efecto multicolor en los motivos brocados.
Hoy en día, después de unas tres generaciones, sólo una mujer usa huipil de forma cotidiana. Únicamente durante eventos especiales, unas cuantas mujeres y niñas usan el huipil, pero la práctica de cultivar, varear, hilar y teñir el algodón se ha perdido por completo. Esta decadencia en el uso del traje local ha ocasionado una pérdida muy significativa en la habilidad de tejer y brocar lienzos. Curiosamente, al contrario de lo que ocurre en torno al uso del telar, la lengua chinanteca sigue relativamente fuerte y es hablada y escrita en la comunidad, aunque muchos de los términos asociados a los procesos textiles están a punto de desaparecer.
En años recientes ha habido varios intentos locales de reanimar el conocimiento y la práctica del tejido. Uno de ellos fue la formación del grupo Ha-Lí, fundado en 2015 por iniciativa de la maestra Isabel Arenas Aparicio y que se conforma por doce tejedoras y bordadoras de todas las edades. Ellas fueron asesoradas por la señora Juana María Hernández, quien tiene 104 años de edad y es la única mujer en la comunidad que todavía porta un huipil de forma cotidiana. En gran parte gracias a ella, este grupo ha podido rescatar muchos de los términos en chinanteco, no sólo del telar, sino también de aquéllos relacionados a procesos con tintes naturales y motivos tradicionales, entre otros conocimientos. En una reciente colaboración con este grupo, el MTO pudo documentar un vocabulario extenso de términos asociados al telar, en el chinanteco de Sochiapan, como aquí se muestra.
Para conocer más sobre la riqueza histórica del tejido de Sochiapan y otros pueblos chinantecos, se puede visitar la exposición Viajes por la Chinantla, 1936: fotografías de Bernard Bevan e Irmgard W. Johnson, donde se muestran textiles de esta región de la Chinantla provenientes del acervo del MTO junto con fotografías procedentes del acervo Irmgard Weitlaner Johnson que se pueden consultar en la Biblioteca de Investigación Juan de Córdova.