Entregan retablo restaurado en San Miguel el Grande
San Miguel el Grande, Oax.- Después de varios meses de trabajos de restauración, el retablo dedicado a la Virgen del Rosario de la iglesia de esta comunidad de la Mixteca oaxaqueña fue entregado oficialmente a los habitantes.
La entrega se realizó este lunes y estuvo a cargo de Luis Huidobro Salas, restaurador de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC) del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y Sebastián van Doesburg, director de la Biblioteca de Investigación Juan de Córdova (BIJC) de la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca (FAHHO), instituciones que —en coordinación con el Fondo de Apoyo a Comunidades para la Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (Foremoba) del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta)— y los habitantes de esta población, unieron esfuerzos para lograr rescatar este inmueble histórico.
Huidobro Salas explicó que este retablo lateral —construido del siglo XVII— tenía varias capas de pinturas aplicadas a lo largo del tiempo, lo que dificultó su retiro completo, por lo que el equipo de restauración decidió eliminar sólo la última capa que estaba incompleta y era de poco valor estético y dejar la que tenía más significado y facilitaba una mejor lectura de la pieza.
“Esta es una de las características de esta obra y, sin embargo, tiene otra capa más [abajo] que es la del siglo XVII. Ya no se aprecia, ya se cubrió para que no quedara una serie de estratigrafías, eliminamos las que tenían menos valor y estaban muy perdidas y dejamos la que estaba más completa, de tal suerte de que esta proteja a la otra. Lo que buscamos no es transformar la obra sino resguardar los valores principales”, dijo Huidobro.
El retablo lateral de la iglesia de San Miguel Arcángel es un buen ejemplo de los retablos tempranos en Oaxaca. Tiene un sistema constructivo reticular, forma casilleros entre las columnas que posee y en cada uno de ellos se colocan pinturas o esculturas. Para Huidobro, una de las cosas interesantes de la pieza es que el retablo completo se sujeta por medio de postes, es decir, es medianamente independiente del muro de la iglesia.
“Ahorita dejamos el retablo a nivel conservación, que es cuando se interviene la obra pero algunas partes no se llevan a la reintegración total porque es una obra que está en buen estado. Lo que buscamos es solamente intervenir las partes que se requieren para su lectura, aquellas que llamamos lagunas. Cuando uno ve una obra y lo primero que aprecia es una laguna, la lectura de la obra completa se dificulta, lo que hicimos es desaparecer esas manchas, estas lagunas, y volverlo homogéneo para que nuevamente se pueda leer”, dijo el restaurador.
En la restauración también se retiró un fanal que fue colocado, no se sabe bien si en el siglo XIX o XX. Además, se repusieron y se quitaron barnices oxidados y manchas. A petición de la misma población se restauraron tres esculturas: una Virgen de Guadalupe, un Señor de las Tres Caídas, y la imagen principal de la iglesia y patrón del Pueblo: San Miguel Arcángel.
En las esculturas se encontró suciedad y el desprendimiento de la policromía, “el Cristo tenía una pérdida de cincuenta por ciento del rostro. La escultura de la Virgen tenía una capa de pintura que ocultaba una policromía del siglo XVIII.
Para Luis Huidobro la confianza que la comunidad depositó en los restauradores es muy importante, con ello se ha logrado que los habitantes se interesen en la conservación de sus piezas históricas, como en el caso del retablo que pasó de estar bastante deteriorado a ser una obra llamativa y significante para la gente.
“Con la intervención se va a conservar mejor porque ahora es digno de estar en el templo, como pasó con las esculturas que, aunque eran muy socorridas, muy importantes para la comunidad, ya estaban muy deterioradas. Se hicieron fanales para protegerlas del toque de la gente, aunque esto significa un cambio de sus tradiciones, pero ellos decidieron que el trabajo valía tanto la pena que sería importante que se conservaran de esta manera”, culminó Huidobro.
La obra fue financiada de manera tripartita con una aportación de 308,000 pesos por parte del programa de Foremoba, 350,000 pesos por parte de la población y 350,000 pesos por parte de la FAHHO.