El cine y la radio, formas de protesta y concientización
Oaxaca, Oax.- Huicholes, los últimos guardianes del peyote fue la proyección inaugural de El lugar que habitamos, la primera muestra de Cine y Radio Comunitarios en Mesoamérica que se llevó a cabo del 11 al 14 de junio en la capital oaxaqueña. Esta tuvo como objetivo mostrar las producciones radiofónicas y audiovisuales que se realizan a lo largo de Latinoamérica y Canadá en defensa y cuidado del territorio.
En entrevista con Paola Morales Vázquez, coordinadora de esta muestra que organiza Ojo de Agua Comunicación, explicó que el objetivo “es mostrar que en las comunidades se están dando procesos de comunicación, producción audiovisual y radiofónica, y que es importante que la gente se dé cuenta de que existen y que además vean que hay otros procesos que abordan la defensa del territorio como una alternativa de vida. Tenemos la convicción de pensar que en este mundo hay otras alternativas de vida, tal vez no queremos estar en contra de una minería, simplemente decir: esto es lo que existe, con sus contradicciones y dificultades”.
Morales Vázquez detalló que la muestra buscó abrir perspectivas y panoramas a los que asistieron a las diversas proyecciones y actividades programadas en la ciudad, “que conozcan lo que se vive en Centroamérica, que tengan una relación y hagan una especie de comunicación y solidaridad entre los pueblos, tanto por proyectos de despojo, pero también por proyectos culturales y audiovisuales, de rescate y de defensa de la vida”.
La curaduría audiovisual y radiofónica se llevó a cabo durante dos meses de trabajo. Los miembros de Ojo de Agua Comunicación buscaron producciones realizadas por organizaciones independientes no gubernamentales y en comunidades donde han trabajado y colaborado, además de proyectos internacionales con un sentido afín al de la muestra como Wapikonia, de Canadá, TV Serrana, un proyecto de la Sierra Maestra; Imcine, Ambulante más Allá y ACISAM, Oaxaca Cine.
“Oaxaca es una región muy compleja. Ha habido muchos proyectos mineros con intenciones de instalarse, pero las comunidades son muy fuertes y las mineras no han logrado quedarse como en otros lugares. La región de Mesoamérica no es como la de Europa, donde el sistema de vida es mucho más hacia el capital, al consumo a modo de vida muy establecido. En Centroamérica y otras partes de Canadá existen comunidades que son muy propias, cuando lo originario se confronta con lo contemporáneo es cuando existen estos conflictos, por eso es que lo presentamos aquí (Centroamérica), porque es aquí donde se dan estos conflictos entre las riquezas culturales gastronómicas, lingüísticas, pero también esos conflictos con megaproyectos”, afirmó Morales Vázquez.
La entrevistada resaltó que en Oaxaca la producción audiovisual y radiofónica crece constantemente, lo que se refleja en las cuatro grandes radiodifusoras que se localizan en el estado: en Santo Domingo Zanatepec, en el Istmo de Tehuantepec; en Santa María Jicaltepec, en la Costa, en Mazatlán Villa de Flores, en la Mixteca; y en Magdalena Teitipac, en la región de los Valles Centrales. “Estos son los grandes proyectos radiofónicos que han podido salir adelante”, culminó.
Durante cuatro días se proyectaron 17 producciones audiovisuales, en su mayoría cortometrajes, y 13 proyectos radiofónicos que se transmitieron en diferentes radios de la ciudad y comunidades. El lugar que habitamos tuvo distintas sedes en la ciudad, tales como la Biblioteca Andrés Henestrosa, el Centro Cultural San Pablo, la BS Biblioteca Infantil de Oaxaca y la Plazuela del Carmen Alto, en las que se proyectaron trabajos de Cuba, Nicaragua, El Salvador, Honduras, Guatemala, Canadá, Argentina, Bolivia y México.