Editorial
El presente está solo. La memoria
erige el tiempo. Sucesión y engaño
es la rutina del reloj. El año
no es menos vano que la vana historia.
Jorge Luis Borges
Hace ya un año que la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca, con el ánimo de ser responsable ante la pandemia por Covid-19 y no propiciar contagios masivos, cerró sus puertas al público. Dejamos de presentar conciertos y actividades, cerramos las exposiciones, dejamos de escuchar las risas de chicas y chicos al visitar nuestras bibliotecas y museos, clausuramos congresos y conferencias y dejamos de tener contacto directo con la comunidad, pero no por ello dejamos de trabajar para ella, al contrario. Hemos aprovechado el tiempo para llevar a cabo la enorme tarea de limpiar, organizar y catalogar los acervos y colecciones de la Fundación —ya sean bibliográficos, filatélicos, numismáticos, de textiles o documentos— con la finalidad de conservarlos y mantenerlos en buen estado. También estamos en el proceso de crear plataformas digitales que den acceso a estos acervos y colecciones y que difundan sus contenidos. De la misma forma, hemos establecido un proceso de reflexión e integración hacia el interior de las diferentes instituciones que conforman la familia FAHHO para realizar proyectos educativos en común, proyectos que buscan abrir espacios de diálogo con nuestro público. Este proceso de pensamiento y cocreación, guiado por el Instituto DIA (Desarrollo de la Inteligencia a través del Arte) y La Vaca Independiente, nos ha servido para encontrarnos y constatar que nuestro corazón sigue con ustedes, que tenemos toda la fuerza y energía para desarrollar múltiples actividades que nos permitan estar cerca, brindar opciones diferentes de aprendizaje y adaptarnos a esta nueva realidad.
Diferentes programas de la FAHHO, por sus características de emergencia y con extremas medidas de precaución sanitaria, como el Programa de apoyo a hospitales y servicios de salud, el Programa de restauración de viviendas y monumentos afectados por los sismos, el Programa de reforestación social y el Programa de apoyo a los artesanos, todos ellos continúan con su labor. Este número del boletín está dedicado a presentar las diferentes actividades que hemos desempeñado a lo largo de este año, que se ha extendido más de lo que cualquiera hubiese imaginado o deseado. Las circunstancias nos obligan a estar a puerta cerrada, pero seguimos pensando y trabajando para la comunidad oaxaqueña.