CENTENARIO DEL NACIMIENTO DE JUAN RULFO
Juan Rulfo, adelantado a su época, llevó las técnicas narrativas del cine a la literatura. Su obra creada magistralmente con base en la concatenación, entendida como “la secuencia de los planos que guía la atención del público, desarrolla la narración, establece el tema y también provoca respuestas psicológicas y emocionales en el interior de espectador”. Es la manera en la que nos adentramos al texto literario para descubrir “la propuesta del nuevo rol” de la novela que nos propone el autor, quien con maestría y arte ha influido en la literatura universal desde el boom latinoamericano hasta el reciente premio Alfaguara de Novela 2017, otorgado al español Ray Loriga.
Los cuentos de El Llano en Llamas que abordan temas como el despojo, la injusticia social y abusos de toda índole, siguen mostrando un México actual que se incendia bajo el fuego de una desmedida ambición de narco-gobernantes, quienes controlan bajo su poder a la nación por medio de las instituciones. La fuerza de las imágenes literarias que permean la obra de Rulfo constituyen representaciones e implicaciones en movimiento, las cuales, en el imaginario del lector, como correlato de la conciencia representativa, hacen posible una experiencia estética que genera empatía en la sucesión de las situaciones que plantea. La cadencia poética con que narra las semejanzas en los vocablos dobles son como la reverberación, o la reflexión difusa de la luz, en donde la palabra se resignifica intrínsecamente y repite su tonalidad haciendo eco de ella misma.
De acuerdo con Clary Loisel, la innovación de incluir varias voces en Pedro Páramo y construir una novela fragmentada es una de las razones por las cuales la obra de Rulfo constituye un hito en la literatura mundial. Es decir, la técnica narrativa es brillante y en ella se apoya uno de los temas centrales de la novela: el actuar de un hombre que afecta a toda la comunidad. Un hombre fragmentado, un hombre que no quiere resignarse. Se trata de una novela que habla del transitar; del andar, como el camino que se recorre de un lado a otro, de la vida a la muerte, de un personaje a otro, de una historia a otra. Todo este deambular en temas, tiempos y personajes nos recuerda ineludiblemente al tránsito de andar por la vida. También es la no resignación a la pobreza, a la falta de amor, a la búsqueda de un padre ausente, a dejar de vivir aunque la sociedad lo condene a uno. Pero ¿será también Pedro Páramo el héroe que no se resigna a seguir vivo y por eso Juan Preciado no lo encuentra entre tantos muertos?
En Rulfo los temas son universales, por ejemplo, en el taller que realizamos en la Biblioteca Henestrosa, a Ceci le llamó la atención el amor sufrido que se da entre Susana San Juan y Pedro Páramo. Un amor insertado en una trama de historias que se entrecruzan. Para Salvador, la figura del padre es un conflicto medular en la obra. Silvia encontró la búsqueda de identidad. Alfredo se quedó con Luvina. María, Abraham, Feli, Mireya, Rodolfo y yo queremos regresar a la Henestrosa para seguir leyendo Pedro Páramo. En este texto fragmentado y circular a la vez, que con sus personajes nos lleva de la mano a un mundo que se sitúa en lo más profundo de cada ser humano.