Boletín FAHHO Digital No. 44 (Nov 2024)

Arte en vidrio

Jorge Contreras
Fotografía: Acervo del Centro Cultural San Pablo

Cada artista sabe que está viviendo por segunda vez.
Carlos Fuentes

El Centro Cultural San Pablo presenta este otoño una exposición dedicada al arte en vidrio. Tres empresas que producen vidrio en Oaxaca fueron fundadas por artistas y, a lo largo de los últimos años, han trabajado con diseñadores o con otros artistas para crear obras en colaboración, además de sus propias piezas.

Para esta exposición Christian Thornton (Xaquixe) presenta una instalación de enigmáticas obras que dialogan con el camino de agua del patio Dómina, como si quiotes de vidrio negros y blancos crecieran del camino sobre pequeñas piedras como enormes botones a punto de abrir, junto a semillas de vidrio descansando con toda su voluntad en tensión concentrada.

Estas plantas que viven sobre tallos de acero, parecen también flamas detenidas en otro tiempo, y son ideales para este patio donde un día puede durar un año, o diez años. Christian Thornton también presenta distintas obras realizadas en colaboración con Gandalf Gaván, Christina Stadlbauer y Mateo Gabayet; y obras que algunos artistas han realizado en Xaquixe: Jan Hendrix, Nicola López, Adán Paredes y el maestro Francisco Toledo.

Salime Harp (Xaquixe) presenta una instalación de 8 metros de altura compuesta por hojas y flores de vidrio de distintos colores que remiten a un vestido del Istmo de Tehuantepec, y nos muestran las posibilidades del material para construir desde pequeñas hojas de un verde hermoso, hasta flores grandes de un rojo o naranja intensos que recuerdan el horno y el fuego que les dio origen.

Esta obra de Salime, pensada y diseñada para ese muro del atrio del Centro Cultural San Pablo, además de un homenaje a la tradición textil de Oaxaca, es un reconocimiento a la habilidad de los artesanos y artistas que usan el vidrio como materia prima.

Y por otra parte, considerando que el vidrio es arena de sílice (SiO2) + carbonato de sodio (Na2CO3) + caliza (CaCO3) + fuego que calienta estos elementos a 1500 grados centígrados; en esta hermosa instalación hay también una metáfora del fuego como forma de presencia concentrada, como modalidad del sol que está en todas partes, y que consume.

Fotografías: Acervo del Centro Cultural San Pablo

Jason Pfohl (Gorila glass) presenta en la exposición una instalación titulada: Cruzando el umbral, que es el registro de un futuro performance que ya sucedió, pero regresa para seguir ocurriendo una y otra vez con las clásicas etapas de la narratología y como un arquetipo de la comprensión de la experiencia humana.

La instalación con esferas de vidrio que se suspenden sobre los vestigios prehispánicos de San Pablo, incluye fotografías del performance inspirado en la sensación de volar, con el recorrido canónico de las narraciones míticas: soñar, buscar, despertar, ascender, capturar, completar una serie de pruebas, recibir asistencia divina, cumplir la búsqueda y regresar.

En esta obra, el vidrio simboliza el santo grial al que se une el artista en un momento de conjunción, cuando aparecen las esferas como formas materiales que antes no estaban, y gracias a una acción emergen de otra manera en el mundo, como el propio artista que encuentra una nueva forma de estar en el mundo.

Diego Vides (DoStudio) presenta obras realizadas por él mismo y otras que ha elaborado en colaboración con diseñadores y otros artistas. Cada una de sus obras puede funcionar individualmente, pero también en conjunto, cada una otorga significado al espacio que ocupa y propone un ambiente particular; y como están diseñadas para tener un uso, le proporcionan nuevo sentido al espacio que ocupan en conjunto; o incluso a la experiencia en la cual se usan; por ejemplo, al acto de fe de encender veladoras.

La empresa de Diego Vides se enfoca en colaborar con diseñadores para producir productos de vidrio soplado combinando técnicas tradicionales y contemporáneas; en algunos casos incluso otorgando un nuevo uso a materiales, como en el caso de la colaboración con FIBRA x Hermano Maguey, que dio origen a las hermosas lámparas hechas con vidrio y con fibra de agave que cae mitigando y cobijando la luz al mismo tiempo para crear un ambiente sereno.

Gracias al extraordinario trabajo que han realizado estos artistas en sus empresas, y a la iniciativa de Salime Harp, el Centro Cultural San Pablo presenta también la segunda edición de la Bienal Iberoamericana de Arte en Vidrio, con obras en concurso y obras de artistas invitados.

Fotografías: Acervo del Centro Cultural San Pablo

El primer lugar para artistas intermedios, se otorgó a la artista colombiana Alejandra Lamprea, quien elaboró, en la técnica conocida como “A la flama”, unas pequeñas semillas ámbar translúcidas; como si fueran tubérculos, de los cuales emergen tallos delgados en distintas etapas, raíces y una hoja, sugiriendo que puede ser una misma semilla en diferentes momentos de la germinación, o varias semillas que hacen emerger plantas que al mismo tiempo las transforman.

Además de abordar el tema de la Bienal, que consistía en explorar la idea de “Origen”, esta obra también trae a colación el misterio de la emergencia que da paso a la comprensión, y alude a la voluntad que es el principio de cada cosa visible.

El primer lugar de la categoría de avanzados lo obtuvo la artista colombiana Martha Isabel Ramírez, por la obra Nacedero. Doce cajas de vidrio similares a cajas de Petri albergan gotas de vidrio alargadas con diferentes formas, aludiendo al agua como origen de todo. Las piezas cuelgan separadas del muro para producir sombras donde los círculos se multiplican y se confunden. Para la artista, las sombras y la luz que atraviesan sus cajas de cultivo son parte de la obra, pues sirven para intuir los distintos ámbitos en que funciona una idea o una emoción.

En este caso el vidrio no sirve solamente para construir una figura o forma reconocible, sino para expresar una idea sencilla y profunda al mismo tiempo.

Ambos premios coinciden en abordar el origen como momento en que algo aparece en el mundo material, algo adquiere forma o cuerpo y empieza a estar. Normalmente el arte tiene esa facultad de otorgar una nueva vida a algo que antes no estaba de cierta forma, incluso a la experiencia.

Además de las rejas de acero, el Centro Cultural San Pablo cuenta con varias obras elaboradas en vidrio por el maestro Toledo; ellas dan cuenta de que mirar el mundo por segunda vez, renovar cotidianamente el significado de cada experiencia, es una manera de descubrir la poesía que habita discreta en cada día, en cada material y cada objeto, para permitirle estar en la vida cotidiana.


Lo sentimos, la página que buscas no existe.

¡Muchas Gracias!
En breve nos pondremos en contacto contigo.