El retorno de “el Güero”
El inicio del decenio marcará una nueva etapa en los Diablos Rojos del México. De la mano de su aniversario 80 en la Liga Mexicana de Beisbol, el equipo escarlata continuará persiguiendo una nueva corona, ahora con la figura de Sergio Omar Gastélum como responsable de plantear la estrategia para conseguir la meta.
Originario de Ciudad Obregón, Sonora, “el Güero” no es un personaje ajeno para la organización escarlata, ya que fue defendiendo esa franela con la que puso fin a una de tres décadas llenas de triunfos y campeonatos en los dos circuitos más importantes de nuestro país. Cuando Gastélum apareció por primera ocasión con los Diablos en 2013, la reacción de la fanaticada fue de incertidumbre, tomando en cuenta que fue un referente del archirrival, los Tigres. Muy pronto se desvaneció cualquier inquietud de la religión roja, porque lo primero que distinguió al sonorense fue precisamente su capacidad para sobresalir en los grandes momentos, y los felinos fueron clientes distinguidos.
El final de la temporada 2013 no fue el que se esperaba y los movimientos no tardaron mucho. El México apostó por armar un equipo lleno de chamacos que cumplieron su proceso de desarrollo en la Academia y en las diferentes ligas de preparación. “El Güero” Gastélum fue uno de los veteranos que permanecieron para 2014, donde su participación fue determinante, sobre todo, en el vestidor. Su amplia experiencia le permitió esperar y aprovechar los momentos de aportar en el terreno, lo mismo que adoptar un rol de mentor durante los entrenamientos y cuando estaba en la banca. Se convirtió en una especie de coach-jugador.
La nueva generación de Diablos aceptó muy bien al viejo lobo, quien, a pesar de sus lesiones, todos los días estaba disponible para ser tomado en cuenta. Gastélum supo ganarse la confianza de los jóvenes con un lenguaje simple y muy sincero. El experimento funcionó y los escarlatas lograron una corona que se les negaba desde el 2008.
Era cuestión de tiempo para que Sergio Omar cerrara el ciclo como jugador activo y abriera el de estratega. Mero trámite fue su paso por Ensenada con los Marineros, cuando se presentó la oportunidad de comandar a los Guerreros de Oaxaca en la segunda campaña de 2018.
De una primera parte del año para el olvido, la Tropa Zapoteca escribió el mejor capítulo del calendario, superando un juego de vida o muerte, conquistando la Zona Sur y quedándose a nada de sorprender a Monterrey en la Serie Final. Esos Guerreros no ganaron el campeonato, pero nadie desplegó un juego tan vistoso como el suyo.
Talento y voz de mando pusieron a Oaxaca en los cuernos de la luna.
Como la primera vez que llegó a los Diablos Rojos, Sergio Gastélum volverá a encontrar un equipo contendiente, una afición que tiene sed de victorias y una directiva que quiere celebrar sus ocho décadas a lo grande en su espectacular infierno.
¡Bienvenido otra vez!