Boletín FAHHO No. 33 (Nov-Dic 2019)

Formación de usuarias/os

Nancy Mariano Rojas

Las bibliotecas son espacios para el conocimiento, ya sea científico, espontáneo, didáctico o lúdico; para el goce de un libro, para la observación, la reflexión, el disfrute de su arquitectura, para crear mundos paralelos… La comunidad, que encuentra en ellas algo de lo antes mencionado, se vuelve pilar importante de las mismas y las convierte en sus refugios. Es así porque en los libreros y sobre las mesas, hay libros que les atraen, que les emocionan, que responden a sus necesidades. 

Lograr una experiencia literaria favorecedora desde los primeros años, que propicie el interés por la lectura y sus beneficios a corto, mediano y largo plazo es una labor que requiere de mucha dedicación, planeación y compromiso de las bibliotecas y del personal, además de que parte de su responsabilidad social es facilitar el acceso y el uso de la información. 

Las BS están pensadas principalmente para un público infantil y juvenil. Por tal motivo, buscamos la inserción social por medio de la prestación de servicios informativos, culturales, educativos, artísticos, creando una imagen que estimule y atraiga también a otros grupos de edades. Por ello, desde la apertura de la primera BS (2007), se ha perfilado un tipo de usuario, iniciando su formación incluso antes de cumplir el primer año de vida. En este sentido, promovimos –con los servicios y un acervo cuidadosamente seleccionado– la autonomía, para que el usuario sea capaz de seleccionar sus títulos con base en la distribución de los materiales, en las sugerencias por parte de personal y del gusto propio. Buscamos que la biblioteca se convirtiera en un sitio de interés constante, hasta lograr usuarios activos, autónomos, críticos, dialogantes y amantes de la lectura. 

La formación de usuarios es un esfuerzo del personal por orientar a los visitantes sobre las actividades que se presentan en cada centro bibliotecario, pero sobre todo, de encontrar e identificar con mayor facilidad el acervo, de identificar la oferta para ellos: talleres, actividades especiales, cine, etc. Distribuir la información para hacerla más accesible al público es parte de la infraestructura intelectual de nuestra biblioteca, como la disposición del acervo de acuerdo con las edades e intereses, y la selección del mobiliario apto. 

En paralelo, generamos materiales que coadyuvan en el proceso de formación de usuarios. Es el caso del boletín mensual, en el cual está contenida la programación de cada centro; otro ejemplo es la alerta A de lectura, publicación bimestral donde se presentan las novedades sobre promoción lectora, libros, bibliotecas y el trabajo que se desarrolla a partir de estas áreas con niñas, niños y jóvenes. Por otro lado, los carteles informativos contribuyen a que nuestros usuarios no solamente identifiquen las actividades en lugares visibles de la ciudad, también provocan el interés y el acercamiento a nuestras bibliotecas. Lo mismo ocurre con la información que circula en nuestras redes sociales. 

El animador a la lectura 

En algunas bibliotecas, el bibliotecario es el especialista en el manejo y uso de la información. En nuestro caso, se creó la figura de “animador a la lectura”. Como su nombre lo indica, es quien anima a leer, es el mediador entre el usuario y la información. Su papel como gestor de la información lo lleva a planear una serie de acciones para responder a la demanda y las necesidades de la comunidad, que van desde conocer el nombre de los usuarios, explicar detalles sobre el libro o la biblioteca, impartir talleres, leer en voz alta, contar cuentos, dar recorridos por las instalaciones; acciones que promueven la independencia de las y los usuarios dentro de la biblioteca. 

PERFIL DEL USUARIO  BS
#BSLOVERS: 

• Autonomía para la selección de títulos a partir de estantería abierta, es decir, que los libros están dispuestos para que los usuarios escojan aquellos que les interesen sin necesidad de solicitarle al animador a la lectura en turno. 
• Conocedores del uso y manejo del acervo desde los primeros años escolares: cuidado del acervo dentro y fuera de la biblioteca (préstamos a domicilio). 
• Capacidad de iniciativa e independencia a través de la interacción con el espacio y la relación de confianza con el personal. 
• Colabora en la trasmisión del uso y manejo del acervo, así como del cuidado del espacio, en general, de manera voluntaria, porque ha hecho de alguna biblioteca de la familia BS su casa.

Lo sentimos, la página que buscas no existe.

¡Muchas Gracias!
En breve nos pondremos en contacto contigo.