OAXACA Y SU BIODIVERSIDAD
Biodiversidad se define como la variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, ya sea que se encuentren en ecosistemas terrestres, aéreos, marinos, acuáticos o en otros complejos ecológicos; es decir, expresa la existencia de diferentes formas de vida sobre la Tierra.
México es considerado uno de los países con mayor biodiversidad en el planeta, pero a su vez presenta una inmoderada explotación de los recursos naturales, fragmentación de hábitat, contaminación, entre otros. Todas estas modificaciones extremas que sufren los espacios naturales representan un grave problema para las especies que los habitan y que también tienen repercusiones negativas directas en el bienestar de los seres humanos.
La biodiversidad de México es un tesoro que llena de orgullo y nos enaltece en son de gozo. Más aún a los oaxaqueños, ya que el estado se ubica como el primer lugar nacional en cuanto a biodiversidad, por lo que debemos sentirnos privilegiados y asumir el compromiso de conservarla y mantener el equilibrio de los diversos ecosistemas. Es importante desarrollar proyectos que fortalezcan la investigación para así hallar soluciones fundamentadas, sólidas acorde con las necesidades de las especies involucradas, su localización geográfica y las comunidades donde se encuentren para lograr la conservación y el desarrollo sustentable de los recursos.
Por su ubicación, topografía y clima, Oaxaca presenta una amplia variedad de ecosistemas, suelos, especies de plantas y animales. Según lo señalado en el libro Biodiversidad de Oaxaca, de Abisaí J. García-Mendoza, María de Jesús Ordóñez Díaz y Miguel Briones-Salas (2004), nuestro estado ocupa el primer lugar en riqueza de aves, reptiles y anfibios, escrofulariáceas y asteráceas (familias de plantas con flores), así como helechos y orquídeas, de los cuales muchos son endémicos, esto quiere decir que solamente existen en el lugar que habitan.
Además, en Oaxaca contamos con todos los tipos de ecosistemas presentes en el país, desde matorrales espinosos hasta bosques tropicales; desde manglares y arrecifes de coral hasta bosques nubosos, de pino, encino y oyamel en las montañas más altas.
Por la presión demográfica, el uso irracional de los recursos naturales, la escasez de áreas naturales protegidas, contaminación, entre otros factores, esta biodiversidad se ha visto amenazada, presentándose problemas ambientales que alteran el equilibrio en los ecosistemas, arriesgando la biodiversidad terrestre y acuática, así como la calidad de vida de los oaxaqueños, ya que la naturaleza nos brinda servicios ecosistémicos como alimento, agua y aire limpio; también sirven como reguladores del clima y enfermedades, y nos ofrecen espacios tanto recreativos como culturales.
Los humanos, como seres dominantes, hemos causado a lo largo de los años un daño significativo y profundo en la naturaleza. Por el otro lado, los humanos nos hemos distinguido por ser una especie capaz de resolver problemas. Ante todo, tenemos la responsabilidad de hacerle frente a estas lesiones que le hemos propiciado al medio ambiente y el gran compromiso de remediarlas.
Falta un gran camino por andar, pero el desarrollo de la investigación y los esfuerzos realizados en la conservación sobre la biodiversidad oaxaqueña mantienen la esperanza de poder detener esos estragos.