Lorenzo Bundy, mánager centenario

En la historia del deporte, cualquiera que sea, es muy extraño que un personaje se pueda considerar legendario o histórico en dos o menos temporadas en su puesto, por lo que Lorenzo Bundy se ha convertido en un caso excepcional en el beisbol con los Diablos Rojos del México.
El pasado 31 de mayo, en Querétaro, el equipo escarlata derrotó 19-4 a los Conspiradores, en lo que representó la victoria número cien del mánager estadounidense en temporada regular. Este acontecimiento lo ha convertido en el décimo sexto piloto del México que alcanza dicha cifra de victorias, pero quien más rápido lo ha conseguido.
Al director de orquesta de la Pandilla Escarlata le bastaron 127 juegos para llegar al centenar de éxitos, superando al boricua Max Oliveras, quien lo hizo en 130 juegos al frente del equipo en las campañas de 2010 y 2011.
De los 16 directores deportivos que han ganado por lo menos 100 juegos con los actuales reyes de la LMB, 10 han logrado ser campeones, y 3 lo han hecho en más de una ocasión: Bernardo Tatis, Tomás Herrera y Benjamín Cananea Reyes.
A Bundy se le puede considerar desde ahora una leyenda de la estrategia roja, ya que lideró a los Diablos Rojos del año anterior en su mejor temporada, la mejor de todos los tiempos, con más de 90 juegos celebrados en toda la Liga, además de que logró redondear con el título en su debut como mánager y requiriendo 16 victorias de postemporada para alcanzarlo, cifra máxima en las memorias del
club capitalino.
Sin contar sus innumerables logros en tanto jugador y sus tres gallardetes como primera base, Lorenzo Bundy es ya un personaje que cuenta con todos los blasones para ser considerado una leyenda del equipo 17 veces campeón, hablando únicamente de su faceta como mánager, sin contar que sus 29 triunfos alcanzados en 2025 —al momento de escribir estas líneas— los ha conseguido con una ofensiva devastadora, pero con un staff de lanzadores abridores que no ha estado a la altura de lo que se esperaba. Esto es una muestra de los alcances de Bundy, quien tardó muchos años en llegar al equipo de sus amores, pero que no ha demorado en dejar una huella muy especial en la historia del mismo.