Boletín FAHHO Digital No. 38 (May 2024)

Barro chorreado

Mónica Díaz

Ser alfarera es regresar al origen, a la esencia, al hogar; es modelar el barro con el afán de darle vida al polvo. Esto lo sabe Marisela Zambrano Miguel, artesana originaria de la comunidad de Vistahermosa Tonaltepec quien, con sus manos y habilidad, sigue dando forma a comales, jarras, floreros, cántaros y otras piezas de barro.

Marisela me platica que encontró en este oficio su felicidad, el sustento para sus hijas y el camino de regreso a su pueblo. Empezó a trabajar el barro desde niña; hija de padres alfareros, veía a sus hermanos amasar y modelar el barro, así fue como aprendió, jugando con el barro y mirando a su familia trabajar.

Cada pieza que elabora lleva horas de trabajo, las cuales comienzan cuando sale de su casa para buscar el preciado barro en pequeñas minas que se encuentran a una hora y media de distancia, caminando. La acompaña su burrita Pachoneta, quien es la encargada de ayudarle a acarrear el pesado cargamento de regreso a casa. Cuando llega, extiende el barro en su patio para que se asolee durante tres días, después lo mezcla con agua y lo cuela, lo va amasando poco a poco hasta que queda listo.

Luego, Marisela modela con sus manos el barro: lo hace crecer, le da forma y la cambia, y cuando está satisfecha con su pieza la bruñe con una piedrita. Así trabaja diariamente, pieza tras pieza, durante veinticinco días, después de ese tiempo toda su producción está lista para meterla al horno.

El día de la quema comienza desde muy temprano. Marisela saca todas sus piezas al sol, las pinta con tierrita roja y carga el horno con mucho cuidado, teniendo en cuenta el tamaño, peso y forma de cada pieza, a cada una le encuentra el lugar ideal; cierra el horno y lo va alimentando con leña, va cuidando el fuego; ella conoce los tiempos de su barro y sabe cuándo las piezas están cocidas. Para este momento Marisela ha preparado un té de corteza de encino con el que chorreará todas las piezas, una por una, para obtener el color característico de la cerámica de Tonaltepec. El proceso de quema y chorreado ha durado doce horas, de sol a sol, es un trabajo arduo y el resultado es bello.

Marisela está muy orgullosa de ser artesana, de vivir con y del barro, le gustaría que las nuevas generaciones siguieran haciendo esta actividad y que las personas valoraran lo hecho a mano artesanalmente. En Andares del Arte Popular admiramos y respetamos el inestimable trabajo que realizan los artesanos, por eso les invitamos a conocer las bellas piezas hechas en Tonaltepec y en otras partes de Oaxaca.

Ven a conocer el trabajo de Marisela Zambrano Miguel en Andares del Arte Popular, Avenida de la Independencia 1003, Centro, Oaxaca.


Lo sentimos, la página que buscas no existe.

¡Muchas Gracias!
En breve nos pondremos en contacto contigo.