“Rostros de Arte y Color” comienza su segunda etapa. ¿Qué sigue para el MIO y San Miguel Tixá?
Como en muchos pueblitos de la Mixteca, los días en San Miguel Tixá suelen parecerse bastante. La calma que tanto añoramos en las ciudades es allí cosa de diario para sus 200 habitantes, sin embargo, desde hace cuatro meses, los sábados se han colmado de risas, juegos y preguntas.
La exposición didáctica “Rostros de arte y color” cumple su primera etapa rodeada de ilusiones. Si bien es cierto que muchos habitantes anhelaban desde el comienzo la llegada del MIO a San Miguel, otros tantos mostraban cierto recelo ante la idea de convertir la antigua casa de visita en un espacio para niñas y niños. Es lógico. Después de todo, las necesidades son muchas y el trabajo que implica dar vida a un espacio cultural comunitario puede resultar abrumador.
Sin embargo, gracias al esfuerzo y creatividad de los pobladores, los primeros frutos cosechados superaron cualquier expectativa. Leticia, Marisol, Jimena, Gabriel y Miguel —todos ellos vecinos de Tixá— aprendieron en poco tiempo los veinte principios del modelo educativo MIO. Sin más recompensa que la esperanza de sembrar una semillita de arte en los niños de su pueblo, abren la sala cada semana para compartir con decenas de pequeños las historias de Rodolfo Morales, Rufino Tamayo y Rodolfo Nieto.
Ese modelo del que hablamos rige todo lo que hacemos en el MIO y consiste, a grandes rasgos, en enseñar a través de experiencias y talleres que:
- Son divertidos, nunca se sienten como la escuela y siempre se sienten como el recreo.
- Son creativos, pues van mucho más allá de los recursos, temáticas y soluciones obvias.
- Mezclan la sorpresa por lo desconocido con nuevas formas de acercarse a lo familiar.
- Parten de una planificación detallada, con objetivos concretos e instrucciones claras, y de un ensayo previo.
- Abordan, por medio de la exposición eje o del tema mensual, cuestiones relacionadas con el patrimonio cultural y natural de Oaxaca.
- Conciben a cada niño como el principal actor de su propio proceso de aprendizaje.
- Se basan fundamentalmente en el juego e involucran la dimensión lúdica en todas las etapas de su desarrollo.
- Están orientados a despertar en cada niño la emoción por el descubrimiento y el gusto por aprender.
- Comienzan con una pequeña historia, seguida por una pregunta que provoca la curiosidad de los niños.
- Terminan con preguntas abiertas, las cuales ayudan a los niños a relacionar lo aprendido con sus experiencias cotidianas.
- Promueven el diálogo y el encuentro entre niños que no se conocen.
- Emplean toda clase de recursos didácticos y múltiples tipos de juego.
- Utilizan de forma creativa diversos espacios, reforzando los aprendizajes e intensificando la experiencia lúdica de cada niño.
- Incorporan, tanto como sea posible, la participación de personas vinculadas a la producción y salvaguarda del patrimonio cultural y natural de Oaxaca.
- Incluyen por igual a niñas y niños.
- Consideran en su diseño que los niños aprenden y se divierten de maneras distintas.
- Incorporan mecanismos para que niños más pequeños o más grandes puedan participar de las actividades, aun si no son parte del público objetivo.
- Establecen criterios para que los niños con y sin discapacidad puedan jugar juntos.
- Contemplan desde su planificación cómo participarán los adultos acompañantes.
- Son evaluados antes, durante y después de su ejecución.
Estos son los principios que los mediadores comunitarios de San Miguel Tixá han comenzado a explorar en sus actividades semanales, las cuales se han configurado, hasta ahora, en torno al collage, el dibujo y el grabado. También han podido conocerlos de cerca en los seis talleres especiales impartidos por el equipo MIO.
En “Paisajes de mi tierra” y “Así pintaba Tamayo”, vieron a los niños abordar a su pueblo a través de la mirada bondadosa de Morales y llenarse las manos de tierra para crear una obra con los colores de la Mixteca. Para cerrar el año, en “Estrellas de collage” los ayudaron a aplicar la técnica favorita del maestro ocoteco al máximo símbolo de las posadas.
“Rostros de arte y color” comienza su segunda y última etapa con la promesa de más talleres, un cineclub comunitario y un gran evento de clausura. Pero nuestro trabajo en San Miguel apenas comienza y nada nos ilusiona tanto como imaginar que la pequeña flama de arte y cultura que hemos encendido junto a los habitantes repercutirá tarde o temprano en nuevas ideas, proyectos y sueños nacidos en el corazón de la Mixteca.