El archivo parroquial de Santiago Yolomécatl
Desde el año 2013, arquitectos de la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca, en coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia, han realizado trabajos de restauración en el templo de Santiago Yolomécatl. Como resultado de estas intervenciones, en una torre del templo se localizaron cajas con documentos y libros con pasta de piel deteriorados. La población, interesada en saber lo que contenían y luego en mejorar el estado de estos documentos, buscó el apoyo necesario para su rescate. El grupo de personas que contactó a Adabi Oaxaca es el encargado del templo y es elegido cada año por la autoridad del pueblo, se le denomina: Sociedad Católica.
El archivo parroquial del pueblo es pequeño en dimensión, pero rico en contenido. Está resguardado en veintiún cajas, pero solo seis corresponden al período histórico. Se encuentran catorce ejemplares, entre libros y cuadernillos de la serie de cofradías, que corresponde a los años de 1742 1966. En ellos se concentra información de las actividades que desempeñaban los habitantes del pueblo, sobre todo las relacionadas con la labranza de la cera de Castilla, destinada al mantenimiento de su templo, la celebración de sus santos y la fiesta patronal. También se encontraron inventarios de los ornamentos, imágenes y ropa de los santos. En los cuadernillos se describe la entrega de la cera de Castilla que realizaba el mayordomo saliente al entrante. Los libros están destinados a las cofradías para el culto a san Miguel Arcángel, Nuestra Señora de la Soledad, la Virgen de la Asunción, Virgen del Rosario, Señor de la Resurrección, Santiago Apóstol, Señor del Descendimiento, Virgen de la Presentación, san Antonio de Padua, Virgen de Pascuas y a la Virgen del Rosario.
Durante el periodo novohispano, los frailes dominicos del convento de Teposcolula asesoraron en sus actividades religiosas a los habitantes del pueblo, es por ello que en los libros referidos se registran las firmas de los padres. Sobre todo, porque eran los comisionados de elegir a los mayordomos encargados de las cofradías. También hay registro del crecimiento o disminución de los bienes de las asociaciones, las cuales llegaron a tener cabezas de ganado menor.
Al examinar las rúbricas, notamos que los padres dominicos dejaron de firmar los libros en 1859, dado que durante esta época tuvo lugar la desamortización de los bienes del clero. A partir de 1862 encontramos firmas de presidentes municipales, síndicos y secretarios, quienes se encargaron de elegir, anualmente, al mayordomo. La Sociedad Católica se creó en 1901 y, hasta 1933, los documentos los firmó el presidente de esta asociación. Después de 1934, la Sociedad pasó a denominarse Junta Vecinal. La mayoría de los libros se cierra en 1966.
La información contenida en los expedientes de la Junta Vecinal, referente a la organización social y a los asuntos religiosos, es la continuación de los datos concentrados en los libros de cofradías a partir de la Reforma. Los documentos se ubican en la serie de Asociaciones y constan de 144 expedientes resguardados en cuatro cajas, que abarcando los años 1899 1970.
Estos documentos nos permiten apreciar las transformaciones en la organización social de los pobladores de Yolomécatl, específicamente en los asuntos religiosos. Los antecedentes de la actual Sociedad Católica se encuentran en sus libros de cofradías. Como se mencionó al inicio, a partir de la desamortización de los bienes eclesiásticos el ayuntamiento adquirió la responsabilidad de asignar el cargo de mayordomo al ciudadano que organizaría las fiestas de carácter religioso, así como el cuidado del templo, de los santos e imágenes.